Princesa guerrera

La verdadera princesa de este siglo XXI es la de un cuento que no nos dejaron contar, protagonista desdibujada que recoge las riendas de su maravilloso carruaje pasando de ser pasajera a cochera dirigiendo la carroza por las sendas que ella escoge al ritmo y velocidad que su ser necesita.

Princesa guerrera que no pierde su independencia, que lo mismo forja hierro, que mece con su dulzura el bebé que su mano espera, que firma grandes negocios y mira directamente a los ojos, que sólo busca corazones buenos, fieles y leales y no simples vasallajes que de fuerza interior está llena y que ya no tiene que disimular, que lo puede gritar a los cuatro vientos porque solo da cuentas a su corazón y su mente, que no pierde su zapato por salir corriendo sino que le entrega a quien ella considere caballero.

Que su hada es su voz interior y siempre que la escucha ayuda y proteje, queaunque la bruja mala siempre acecha ella se prepara para defenderse y mantenerla alejada

Princesa de cuanto que busca un compañero o compañera y no un señor o señora de su reino es algo mas valioso que tirar joyas o dinero y es la libertad de poder decidir su mundo entero.

Es aquella que lucha sola porque no siempre tiene a alguien en su reino, la que sigue sin aspavientos porque vive sin plebeyos, que lo mismo viste un traje de cola que una bata, un chándal, unas chanclas, que por ella ya no pagan ni arras ni castillos a cambio de una fiel servidumbre.

Es la que se lo gana ella sola a cambio de la libertad que ello la marca. Poder dar su opinión sin ser interpelada, poder ser ella misma y tal cual ser respetada como princesa, como doncella o como quien quiera que sea.

Es alguien que simplemente es y deja ser.